¿Te ha pasado que estás en clase, mirando al profesor o la pantalla, pero tu mente está a kilómetros de distancia? No estás solo. 

La concentración es uno de los mayores retos en la vida académica, especialmente con tantas distracciones alrededor (¡hola, celular y redes sociales!).

La buena noticia es que mejorar tu concentración es posible. Aquí te compartimos cinco consejos simples pero poderosos para mantenerte enfocado y aprovechar al máximo tu tiempo en clase:

1. Prepara tu espacio (y tu mente) 

Antes de que comience la clase, organiza tu lugar de estudio. Asegúrate de tener solo lo necesario: cuadernos, bolígrafos, agua y tus materiales de clase.

Evita tener el celular a la vista o cualquier objeto que te robe la atención. Tu entorno influye mucho en tu enfoque.

Tip extra: Si estudias desde casa, usa audífonos para aislarte del ruido y poner música instrumental suave si te ayuda a concentrarte.

2. Duerme bien y come ligero

La concentración comienza mucho antes de entrar al aula. Dormir al menos 7–8 horas y alimentarte bien mejora tu capacidad para mantenerte alerta y procesar información.

Evita comidas muy pesadas justo antes de clases, ya que pueden darte sueño o hacerte sentir lento mentalmente.

3. Haz pequeñas pausas activas 

La mente necesita descansos. Si estás en una clase larga, levántate unos minutos, estírate o da una pequeña caminata cuando haya una pausa. Esto oxigena tu cerebro y te ayuda a retomar la clase con más energía.

¿Estás en clase virtual? Simplemente cambia de postura, respira profundo o cierra los ojos por unos segundos.

4. Participa y toma apuntes a tu manera 

Una de las mejores formas de mantener la atención es ser parte activa de la clase. Haz preguntas, responde si te sientes seguro, y toma apuntes con tus propias palabras.

Esto no solo te ayuda a concentrarte, sino que mejora tu comprensión y retención del contenido.

Usa colores, esquemas, mapas mentales o lo que te funcione mejor para mantenerte involucrado.

5. Desactiva distracciones digitales 

Si estás usando el celular o la computadora, silencia las notificaciones o usa aplicaciones que bloqueen redes sociales mientras estudias.

También puedes poner tu celular en “modo avión” o dejarlo fuera del alcance durante la clase.

¿Sabías que volver a concentrarte después de una distracción puede tomar hasta 20 minutos? Vale la pena prevenir.

Concentrarse en clase no se trata de tener una súper fuerza de voluntad, sino de crear condiciones que favorezcan tu atención.

Con un poco de organización, buenos hábitos y práctica diaria, estar presente y enfocado en clase puede volverse mucho más fácil (¡y hasta placentero!).